ANT y pueblos indígenas de la Sierra Nevada acuerdan recuperar 15.000 hectáreas y proteger la Línea Negra
La Agencia Nacional de Tierras definió junto a autoridades indígenas un plan histórico para ampliar resguardos, adquirir predios y sanear 15.000 hectáreas en 2025, fortaleciendo la protección del “corazón del mundo”. · Campesinos e indígenas participan en un plan conjunto de gobernanza territorial. · “Estamos cumpliendo la palabra con los pueblos indígenas”, afirmó el director de la Agencia, Juan Felipe Harman Ortiz. · El proceso se enmarca en los 500 años de Santa Marta para proteger la Línea Negra y fortalecer los resguardos indígenas.

La Agencia Nacional de Tierras ─ANT─ anunció en Santa Marta la puesta en marcha de un plan de trabajo con los pueblos indígenas de la Sierra Nevada, orientado a resolver este año la recuperación y saneamiento de al menos 15.000 hectáreas para avanzar en el cumplimiento de los derechos territoriales y la protección de la Línea Negra.
El encuentro reunió a representantes de los cuatro pueblos, Arhuacos, Koguis, Wiwas y Kankuamos, quienes dialogaron con el director general de la entidad, Juan Felipe Harman Ortiz, en el marco de la mesa de unidad.
El propósito central de este plan es materializar los compromisos adquiridos por el Gobierno del presidente Gustavo Petro en Nabusimake, en agosto de 2024, mediante acciones concretas que permitan avanzar en la ampliación de resguardos, la adquisición de predios priorizados y el fortalecimiento de estrategias ambientales.
Estas medidas buscan no solo garantizar los derechos territoriales de los pueblos indígenas, sino también salvaguardar la Sierra Nevada de Santa Marta, considerada por sus comunidades originarias como el “Pulmón del mundo” y un territorio sagrado para el equilibrio espiritual y ambiental.
“Estamos cumpliendo la palabra con los pueblos indígenas, construyendo un plan de trabajo con tiempos y responsables claramente definidos. Queremos que esta mesa comience a dar resultados concretos en diciembre, especialmente en materia de saneamiento territorial”, señaló Juan Felipe Harman Ortiz, director general de la Agencia Nacional de Tierras.
Compromisos concretos
En la sesión se acordó la designación de delegados de cada pueblo nativo y la conformación de un equipo técnico que trabajará de manera conjunta con las comunidades, bajo la orientación espiritual de los Mamos. El plan contempla, además, la apertura de espacios de diálogo con campesinos y la vinculación laboral de miembros de las comunidades indígenas, como parte de la estrategia institucional.
Luis Enrique Salcedo Zalabata, gobernador del Cabildo Arhuaco Magdalena y La Guajira, resaltó que este avance resulta decisivo para materializar compromisos que habían sido postergados en otros gobiernos.
“Hoy instalamos la primera mesa con la presencia de los cuatro pueblos y avanzamos en un plan de trabajo que busca cumplir lo acordado en Nabusimake: ampliar los resguardos, adquirir predios y consolidar información que permita fortalecer nuestro territorio”, afirmó el gobernador indígena.
La mesa de trabajo se enfocó en garantizar la recuperación de tierras estratégicas y en fortalecer un proceso permanente de protección cultural y ambiental. Para ello, la Agencia Nacional de Tierras acompañará con herramientas jurídicas y apoyo técnico, mientras que las comunidades pondrán al servicio su conocimiento ancestral, orientado a mantener el equilibrio y la armonía del territorio.
Deuda histórica con los pueblos indígenas
El director territorial Caribe de la ANT, Damián Marañón Romero, resaltó el proceso de articulación alcanzado.
“Por primera vez celebramos que el Estado colombiano establezca un trabajo tan cercano con los pueblos de la Sierra. Estamos empezando a saldar una deuda histórica y avanzando en un propósito común, reconocer su papel en el territorio y asegurar que sus culturas continúen fortaleciéndose”.
La instalación de esta mesa de trabajo en Santa Marta se enmarca en la conmemoración de los 500 años de la ciudad, hecho que refuerza la importancia de articular la preservación del macizo montañoso con el desarrollo de la región Caribe. Para la ANT, este proceso representa un modelo de gobernanza territorial sustentado en el respeto, el reconocimiento y la cooperación efectiva entre el Estado y los pueblos indígenas.
Con este avance, la Agencia Nacional de Tierras ratifica su compromiso con la justicia territorial, la salvaguarda de los pueblos originarios y la sostenibilidad ambiental. La entidad asume el rol de garante de derechos colectivos y de puente institucional para asegurar que la Sierra Nevada de Santa Marta se mantenga como un territorio protegido, vivo y en equilibrio, en beneficio tanto de sus comunidades ancestrales como de todo el país.