Queremos vivir con dignidad: 350 campesinos del sur de Magdalena acompañan la Reforma Agraria

La Institución Educativa Departamental Antonio Brugés Carmona, ubicada en el municipio de Santa Ana, al sur del departamento de Magdalena, fue el escenario de una asamblea sin precedentes. Más de 350 líderes y lideresas de una treintena de organizaciones campesinas se reunieron junto al Comité Municipal de Reforma Agraria y delegados de la Agencia Nacional de Tierras —ANT—, con el objetivo de avanzar en el proceso de Reforma Agraria en esta zona históricamente relegada.

El encuentro fue convocado por el Comité Municipal de Reforma Agraria de Santa Ana, una instancia activa desde hace más de un año y que abarca los corregimientos de Barroblanco, Jaraba, San Fernando, Santa Rosa y Germania; así como las veredas Boston, Gavilán, El Campín, La Batalla, Las Flores, Las Palmitas, La Reforma, Montelirio, Ranchobollero, Tapia, La Sonrisa, Calderina, Limoncito, Los Andes, El Vecino, El Paraíso, Si Dios Quiere, Pedro Hernández, Las Antillas, La Mocha y El Reposo.

La Agencia Nacional de Tierras, a través del equipo liderado por Patricia Caicedo Omar, asesora de la Dirección General, participó activamente en el espacio, reafirmando su compromiso con los procesos territoriales desde una perspectiva de reconocimiento y justicia agraria.

“Estamos convencidos de que la Reforma Agraria solo puede avanzar si escuchamos directamente a las comunidades. Aquí no venimos a imponer, venimos a construir soluciones de la mano del campesinado que lleva décadas esperando que el Estado cumpla con su palabra”, afirmó Patricia Caicedo Omar, asesora de la Dirección General de la ANT.

La Reforma Agraria avanza desde el territorio

Durante la jornada, las organizaciones campesinas expusieron sus preocupaciones más sentidas, como el acceso y la formalización de la tierra, las condiciones de vida en las zonas rurales y la necesidad de una consulta popular que dignifique al campesinado del sur de Magdalena. También se destacó la voluntad política del actual Gobierno del Cambio para saldar la deuda histórica con el campo.

Este diálogo abierto fue valorado por los asistentes como un avance institucional clave para superar el abandono y la exclusión que por años han marcado la vida rural en Santa Ana. La participación de la ANT fue leída como una señal clara de que las transformaciones sociales y agrarias comienzan con el territorio y con las voces que lo habitan.

“Reconocemos el papel esencial de las comunidades rurales del sur del Magdalena en el desarrollo del país. Por eso, desde la Dirección Territorial Caribe de la ANT estamos comprometidos en acompañar y acelerar los procesos que permitan garantizar el derecho a la tierra con equidad y justicia”, señaló Damián Marañón Romero, director Territorial Caribe de la Agencia Nacional de Tierras.

Una deuda histórica con el campesinado

Los voceros de las organizaciones campesinas insistieron en que este espacio debe marcar el inicio de una ruta de trabajo conjunta, en la que se traduzca el compromiso institucional en acciones concretas como la adquisición de tierras, el fortalecimiento de la producción rural y la protección de los derechos del campesinado.

El municipio de Santa Ana es un reflejo de la vocación agraria del departamento del Magdalena y de los profundos rezagos en acceso a tierra y bienestar rural. Esta asamblea permitió visibilizar el liderazgo de las comunidades y la urgencia de avanzar en transformaciones estructurales.

La Agencia Nacional de Tierras —ANT— reitera su misión de trabajar junto al campesinado colombiano para garantizar el derecho a la tierra, dignificar la vida rural y promover la justicia social. Este compromiso se materializa en escenarios como el de Santa Ana, donde se construye paz, desarrollo y equidad desde la raíz.