La Alcaldía de Santa Marta, a través de la Secretaria de Salud, continúa realizando acciones de prevención para disminuir los índices de quemaduras con pólvora durante las celebraciones decembrinas.
En la noche de Navidad se reportó un solo caso en Santa Marta; mientras que en el país, según el Instituto Nacional de Salud, INS, se reportaron 69 personas lesionadas durante esa festividad, alcanzando una notoria disminución con relación a los 120 casos registrados para la misma fecha en el 2022.
Jorge Bernal, secretario de Salud del Distrito de Santa Marta sostuvo que “Disminuimos un 50% los casos de accidentes con pólvora al presentarse un sólo caso, a diferencia de los dos eventos en la Navidad del año 2022”.
Recalcó que este resultado no es satisfactorio, puesto que hay suficiente conocimiento del riesgo, y aún así, en contra de las normas y la pedagogía que se viene haciendo cada año, las familias siguen exponiendo a sus hijos a riesgos que pueden llevar a amputación de sus dedos, quemaduras en la piel o pérdida de la visión, hechos que obligan al Distrito a poner al niño o adolescente a disposición de un defensor de familia del ICBF, para restablecer sus derechos.
El caso de quemadura por pólvora en la Nochebuena se presentó en el corregimiento de Taganga, cuando un hombre de 31 años de edad fue alcanzado por una luz de bengala, por lo que fue atendido en el Centro de Salud con quemadura en piel, comprometiendo nariz, párpado y ojo izquierdo, pendiente de valoración por oftalmólogo.
Ya son cinco los casos de quemados por pólvora en Santa Marta en lo corrido del mes de diciembre, uno más que el mismo período del año 2022. Actualmente, todos se encuentran en sus casas, con controles médicos por parte de sus EPS. En todo el territorio nacional, según el Instituto Nacional de Salud, INS, durante diciembre se han lesionado 578 personas, incluyendo 190 menores de edad, además dos eventos con muerte de adulto lesionado.
La Administración Distrital mantendrá sus acciones con la Policía Nacional para incautar y penalizar la producción, comercialización y el uso de pólvora; asimismo, la prevención de accidentes por fósforo blanco y el licor adulterado, para proteger la vida en las festividades de fin de año.
